Camino con una sonrisa como si todo el recorrido fuera un abrazo de bienvenida y la ansiedad por llegar me hace suspirar con alegría. Que momento!
Mi ultima vez acá fue el 20 de febrero, donde aun era temporada, aun quería quedarme, pero las responsabilidades siempre ganan. Llegue y mire el mar como media hora, entre, limpie, arregle, controle y me fui a la playa...
Increíble sensacion de calma, placer, inmensidad, toda vacía, toda para mi....cambiada. El mar hizo sus jugadas y cada vez mas arena se lleva, cada vez mas cerca, palpitante, con sus olas de hoy, verdes, cristalinas altas y retumbantes, me senté en la arena...
Saque cuanta foto se me antojo, a mi, al agua, a la caseta, tantos recuerdos, tantos juegos y chapuzones, tanto coqueteo que ya no siento igual....mejor amigos. No soporto ser falsa, ni que el sea hipócrita, mejor amigos...
Por eso tengo, mi querido eterno mar, es un amor verdadero, único, indescriptible e inmenso, quede una hora mirándolo enamorada, hasta que el frío me supero. Gracias al cielo, lo veo desde casa, como ahora, desde la ventana, sus olas romper y su gruñido constante pues hoy no esta tranquilo, pero pase lo que pase, siempre estará ahí para acomodar mi alma y sentirme completa.
Madres Solteras
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